cuando conocí a Pablo

Recuerdo a Pablo con las lagunas propias de una adolescencia bacanal. Quizá hayan pasado ya demasiados años y por eso me cueste recordar con precisión y holgura las conversaciones que tuvimos entonces. Lo que no dudo en su historia, y seré breve y concisa en relatársela.
Pablo tenía quince años cuando yo le conocí; estudiaba en mi misma clase y siempre se le dieron muy bien las matemáticas, las ciencias, todo eso que yo odiaba. A veces le encantaba llevar la bata blanca y ponérsela, fardando de lo buen médico que sería cuando consiguiera aquel sueño tan pasajero. Varios años después de conocernos por primera vez, Pablo se enamoró de una chica, no era yo, por supuesto, pues la poca relación no habría dado sus frutos entre nosotros de aquella manera nunca, pero aún así, alardecía de mis esperanzas. No voy a comentar el nombre de la chica porque no guarda ningún interés en este momento, quizá se llame María o tal vez Paula, qué mas da. Sólo sé que Pablo estaba profundamente enamorado de ella por aquel entonces, eran de esos amores que te duelen hasta en la médula y en la sustancia gris de tu cerebro de adolescente.  Y él me contaba sus experiencias casi cada día, era la primera en saber qué decía ella o su hermana. La chica nunca se enamoró de mi amigo Pablo. Pero yo sí. Y muchas veces me hice la egoísta  diciéndole que no le convenía. Tampoco me arrepiento. Eran chiquilladas. Nunca fuí lo suficientemente valiente para decírselo a él. No ganaba nada. Los latidos de su corazón pálido no me pertenecían a mí. Fue una pena. Ahora le recuerdo con cariño. A veces hablamos, él se ríe cuando hablo de ella, me cuenta cuán equivocado estuvo, yo sonrío. Nunca pasa nada.

7 comentarios:

  1. Debería de decirle algo, que seguro que hay algo en su blanco corazón que le pertenece a ella. Lo pasado pasado está, ¿quien sabe si ahora su corazón solo late a causa de aquella amiga que le escuchaba? (:

    Una gran entrada,
    como lo que dejas caer por aquí, al lado del pájaro que tan enamorada me tiene con sus cantos.

    Crêpes
    rellenos de
    lacasitos.

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  2. que bien escribes dior mio!

    un beso
    :::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::
    www.buscandoenmiarmario.com

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  3. a lo mejor él se dio cuenta de lo que equivocado que estuvo por no besarla a tiempo, y todavía les quedarán unos minutos para eso cuando hablen, seguro

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  4. yo también conocí a un tal Pablo
    ;)

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  5. ay, la valentía, que endiabladamente escurridiza es ella, que nunca logramos atraparla. muas

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  6. el valor para declararse a alguien...es un tema de lo mas interesante...!:)

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  7. Que hermoso relato, me dejo con ganas de más.
    Espero el libro en mi librería mas cercana o como le hago?

    Saludos :D

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