las tardes de los domingos, las reuniones.

Nunca me gustaron las compañías que traía a casa por las tardes. Formaban un foro o una cosa de esas de gente un poco loca y luego se juntaban para tomar aquel chocolate juntos. A mí me daba un poco de miedo tener a tanta gente saboreando al mismo tiempo aquel chocolate rancio. Sentados en la mesa redonda de la cocina, con caras de estupefacción y desenfreno, como si hubieran tomado muchos gramos de speed a la vez; todos con los ojos cerrados y con las manos hechas puños, apretados, casi una secta católica parecían. Luego comentaban la esperiencia, como si hubieran vivido una parte importante de sus vidas ¡era un chocolate, dios mío!, pero así se pasaban las horas de las tardes lluviosas de Enero, comentando el toque ácido que tenía la décima onza de chocolate al deshacerse durante doce segundos entre las mejillas o el toque amargo cuando se deshacía durante demasiado tiempo. Algunas veces me llevaba unos sustos horrorosos, cuando iba a la cocina a prepararles la cena a los niños, después de ver los dibujos en el salón. La puerta de la cocina estaba cerrada y a veces, mientras los niños cantaban sus canciones preferidas se oían gritos saliendo del interior de ella, como si hubiesen abierto el horno y hubiesen salido todos ellos de repente. Yo abría la puerta despacito, intentando no interrumpirles demasiado, y a veces me encontraba a alguien intentando trepar por la encimera, e incluso alguna que otra mujer entre los huecos de la nevera. Yo hacía como si nada y cogía el cuchillo y el fuet rápidamente, no se me fuera a pegar algo. La locura, digo.

5 comentarios:

  1. prefiero los domingos a los martes ;)

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  2. La locura se pega muy fácilmente, pero, ¡eh! (altamente recomendable para ver la vida de la mejor forma, ahí lo dejo)

    Notre Dame
    te deja sonrisas.

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  3. Prueba a ver si esa locura no es tan mala como parece
    PD: me dejas irme un domingo ahí?

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  4. Ya quisiera yo que todos los domingos por la tarde fueran así, y no tan "comecocos" ^^
    Buceo en el seguidor 9 (no te lo dije).

    Abrazos melburnianos

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  5. Yo los entiendo perfectamente. Si fuera chocolate blanco, pues no, pero si es negro...

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