No tenía días preferidos porque para los rusos no existen los días preferidos. Por lo cual, y si su vida se basaba en la negación que afirmaba Popper, Boris no tenía dias preferidos. No p, luego entonces, no q. Volviendo al tema; si alguna vez le hubieran preguntado de forma directa hubiera dicho que los sábados, para hacer que era tan normal como la caja de cambios de un coche fabricado por taiwaneses, aunque en el fondo querría decir que le encantaban los lunes. Nada más lejos de la realidad, pues era el día en que la gente solía irse a trabajar más temprano, abrumados por las pestañas llenas de legañas y él tenía tiempo para entrar a hurtadillas en sus casas y robarles los periquitos. Con el paso de los años había elaborado múltiples tácticas para no ser visto, pero la ausencia de vecinos en los días laborables era la mejor. Recuerdo que una vez le pillé con las manos en la masa, o en la jaula, como prefieran, y ni tan siquiera pareció sorprenderse. Me miró de arriba a bajo como si no me conociera de nada y luego exclamó un sonoro "Vete" debajo de su bigote negro. Yo me fuí enseguida puesto que nunca me ha gustado meterme en asuntos turbios.

5 comentarios:

  1. Boris es la única persona que conozco a la que le gustan los lunes.Aunque sea por un motivo tan peculiar.

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  2. Cualquiera se mete en los asuntos turbios de Boris!

    (no Ms.Cyanide, a mi también me gustan los lunes y las mañanas y madrugar ^^)

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  3. Los lunes son bonitos si les miras desde un punto de vista peculiar

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  4. Pobres lunes, seguramente se sienten muy solos...menos mal que está Boris para acompañarles. Me cae bien, pero yo tampoco me metería en sus asuntos.
    Un beso :)

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